Ya se hizo
la tradición de ir a comer Torta de Tamal todos los viernes… Por fin deje de
satanizar la bomba calórica… y logre aceptar lo deliciosa que es YUMMM!
La invitación es, pues, a comer tortas de tamal sin que hacerlo sea algo doloroso o prohibido. La Guajolota es una prueba del mestizaje cultural de nuestro pueblo. Tal vez la torta de tamal, pieza clave de la gastronomía histórica de la Ciudad de México, merezca la oportunidad de permanecer y ser digna de nuevo.
Vivia los viernes de Torta de
Tamal!!!!!
Nunca jamás las he probado!! Y la verdad es que solo como tamales de dulce...así que una torta de algo dulce no suena cool...en fin, tal vez algún día decida probarlas luego de tantas buenas referencias!
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